El Bosque Encantado de Aldán es uno de esos lugares escondidos en las Rías Baixas, no tan popular como las playas de Galicia o el patrimonio cultural de la zona.

Se trata de un precioso bosque atlántico que te dejará hechizado y en el que la combinación de caminos, luces y sonidos te embaucará desde el primer momento.

Aunque la imagen del lugar es de estar descuidado, merece la pena pasear por sus senderos para descubrir encantos propios de un cuento de hadas que no te permitirán dejar de sacar fotografías espectaculares.

La finca de O Frendoal es sin duda un destino recomendable para pasar un día en plena naturaleza, caminar por este bosque mágico, descubrir piezas arquitectónicas únicas y en definitiva, regresar a épocas ya pasadas. 


escaleras en el Bosque encantado de Aldán
Fotografía original de Jaime Varela

Situación del Bosque Encantado de Aldán

Puede que no te resulte sencillo llegar al Bosque Encantado de Aldán si nunca has estado antes o si no recibes las indicaciones adecuadas, por eso te vamos a ayudar explicándote exactamente cómo llegar a la finca de O Frendoal (cómo llegar a la finca de O Frendoal).

Su ubicación exacta se sitúa en el kilómetro 109 de la PO-315 dirección Cangas-Bueu, circulando por esta carretera verás la finca del Pazo-Torre de Aldán, que se localiza del otro lado de la misma.

https://www.instagram.com/p/CEZAdD-DOzs/?igshid=10t163i030g5g

Aunque puedes entrar por varios accesos que se encuentran en este camino, una manera fácil de acceder es buscar el río Orxas, que transcurre al lado de la vía y tiene un viejo puente medieval (cómo llegar al sendero de los molinos de Aldán) al lado de un rústico lavadero con el principal acceso al bosque.

Aunque en la zona no hay carteles con información o rutas explicativas, con las indicaciones que te damos no tendrás ningún problema para encontrar este lugar.

Camino del Bosque encantado de aldán
Fotografía original de Alvaro Purre

Historia de O Frendoal

En Aldán, una pequeña villa del ayuntamiento de Cangas do Morrazo (Pontevedra), existe un memorable pazo conocido como la Casa Torre de Aldán que es propiedad de los Condes de Canalejas, quienes eran grandes terratenientes de esta comarca.

Dicho pazo tenía una enorme finca que era usada por sus familiares, amigos y por los propios condes para la caza y otras actividades de ocio y recreo.

Con la construcción de la carretera PO-315 la finca quedó dividida en dos y hace unos años, la mitad en la que no se encuentra en pazo fue donada al Concello de Cangas que ha decidido destinarla al uso y disfrute de sus ciudadanos y los turistas que se decidan a visitarla.

Castillo de O Frendoal

Uno de los principales atractivos del Bosque Encantado de Aldán es su fotogénico castillo, rodeado por un foso con puente levadizo y que emerge entre la vegetación.

Dicen que esta construcción se inició en los años sesenta y servía como zona de descanso para los condes pero nunca se terminó de construir y en la actualidad sólo cuenta con la fachada. Sobre la puerta principal del castillo destaca el escudo de los Condes de Canalejas, también posee un pequeño torreón y una dependencia a la que se puede acceder por la parte trasera. Toda la explanada que está delante de la fortaleza era usada por los condes como campo de críquet.

Aunque el castillo de Aldán no es demasiado grande y se encuentra en estado de abandono, este sigue siendo el verdadero culpable de que el bosque O Frendoal cuente con este halo mágico.

Torre de Aldán
Foto Original de Bares y más Lugares

Acueducto de O Frendoal (Arco de la Condesa)

Otra de las sorpresas que se esconden en la finca de O Frendoal es un acueducto de mampostería, conocido como Arco da Moura o Arco da Condesa.

Esta construcción se cree que es de origen romano (otros dicen que se trata de una construcción medieval) y que conducía el agua de una mina que estaba en la parte más alta de la finca, a una fábrica de salazón que se encontraba en los bajos de la actual Torre de Aldán. Más tarde, los condes restauraron el acueducto utilizando el agua que transportaba para el regadío de sus cultivos, ricos en frutales y hortalizas.

Este sistema fue utilizado hasta los años setenta, y quedó completamente obsoleto con el paso del tiempo, pese a que la construcción inicial contaba con varios arcos, algunos han desaparecido tras la construcción de la PO-315, la carretera anteriormente mencionada.

Arco de la condesa en el Bosque Encantado de Aldán

Entorno del Bosque Encantado de Aldán

El bosque de O Frendoal se caracteriza por ser una zona muy verde, en la que los rayos del sol se cuelan entre las copas de los árboles haciéndote sentir que realmente te encuentras en un bosque encantado.

Repleto de pequeños senderos acompañados de puentes, pasarelas, molinos y otras edificaciones que te invitan a pasear entre los robles, castaños, laureles, abedules y demás vegetación que combina este lugar.

El bosque también cuenta con varios de bancos de piedra, algunos de ellos fueron hechos a partir de antiguos sarcófagos, y mesas que irás encontrando e invitan a sentarse y disfrutar de las vistas y un entorno al que otorga un hilo musical embriagador la presencia del río Orxas.

Pasear por este enigmático entorno te transporta a un mundo de leyendas y magia, sin duda el ambiente es de cuento de hadas.

El bosque encantado es una de esas visitas indispensables que debemos hacer en algún momento de nuestra vida.

Ideal para hacer una escapada de fin de semana y descubrir los encantos de un frondoso bosque que se encuentra muy cerquita del mar. Fuentes, bancos de piedra, el acueducto, el castillo encantando… todo este conjunto de elementos crean un ambiente mágico donde la naturaleza y la tranquilidad convienen en perfecta armonía.

Si tus planes de vacaciones incluyen las Rías Baixas, no te pierdas este maravilloso lugar.